Las catas de aceite de oliva virgen extra son cada vez más populares y, sin duda, una experiencia única para los sentidos. Atrévete a organizar una cata en casa y descubre sensaciones que jamás habrás experimentado antes. Toda una experiencia sensorial que hará que disfrutes mucho más del aceite de oliva virgen extra. 

Pero ¿qué hay que tener en cuenta a la hora de realizar una cata de aceite de oliva virgen extra? En este artículo te lo contamos.

Lo primero es hacerse con tres aceites de oliva virgen extra. Te recomendamos Oro Magna Sur Cosecha Temprana, Premium y AOVE, los tres son de la variedad Picual, la que concentra mayores propiedades beneficiosas para la salud. 

Prepara unas hojas de cata, donde los catadores anotarán sus percepciones tras analizar con sus sentidos cada muestra de aceite. En estas hojas se incluirán, como mínimo, 3 apartados:

- Apartado 1: Atributos positivos 
Frutado | Amargo | Picante 
Su intensidad puede ser ligera, media o alta.

- Apartado 2: Atributos negativos
Mohoso | Avinagrado | Metálico | Rancio | Otros 

- Apartado 3: Puntuación final
Malo | Regular | Bueno | Muy bueno | Excelente

Pero podéis añadir más apartados como por ejemplo:

- Apartado opcional: Aromas
Hierba fresca | Manzana verde | Frutos secos | Higuera | Otros

La cata de aceite de oliva debe hacerse en un lugar donde la temperatura ambiente esté entre 20º y 25º centígrados. Colocaremos el aceite en copas de cata y las cubriremos con un vidrio de reloj. 

Y… ¡Empieza la cata! 

Primer paso: Frotaremos la copa con las manos durante un par de minutos para que aumente su temperatura, la ideal es de 28º centígrados.

Segundo paso: Ladearemos la copa y la haremos girar para que el aceite empape las paredes de la copa.

Tercer paso: Retiraremos el vidrio que cubre la copa y rápidamente introduciremos nuestra nariz para inspirar todo su aroma. Así obtendremos una primera impresión, que afinaremos al repetir el mismo proceso por segunda vez, analizando detenidamente las notas olfativas, poniendo en valor los aromas que descubriremos en el aceite de oliva. Tendremos que diferenciar tres niveles de frutado: ligero, medio o intenso.

Cuarto paso: Sorberemos una pequeña cantidad de aceite y la extenderemos por toda nuestra cavidad bucal, para describir el sabor en boca y el regusto, teniendo en cuenta amargor, picor, astringencia y fluidez.

Quinto y último paso: Valoraremos el aceite que estamos catando. Durante el proceso de la cata de aceite de oliva virgen extra hemos analizado mediante nuestros sentidos sus cualidades, poniendo especial atención para disfrutar de sus características organolépticas, apreciando sus virtudes y expresando nuestras sensaciones. Ahora identificaremos sus atributos, los positivos son frutado, amargo y picante, deberemos valorar el nivel de equilibrio entre ellos. También identificaremos sus defectos, que pueden ser atrojado, mohoso, avinagrado, metálico, rancio... y lo anotaremos todo en la hoja de cata.

Entre cata y cata deberemos esperar unos 15 minutos, mientras, enjuagaremos la boca con agua y masticaremos un trozo de manzana para eliminar los sabores.

Al finalizar la cata, compararemos nuestras anotaciones en las hojas de cata y descubriremos cuál es el aceite de oliva virgen extra mejor valorado por los participantes. 

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